Atrapada.

Alejarse de la realidad, evasión, soledad. Pensar, dar vueltas, andar sin encontrar un camino que seguir, perder el rumbo. Buscar dentro de ti algo que pares el ritmo frenético que sigue tu vida. Stop, silencio. Ruido, lágrimas, pensar, pensar, no hay retorno, ya no, aunque sigas esperándolo. Buscar la manera de cambiar tu realidad, cambiar la manera de mirar, de esperar. Mirar a través de las pupilas, descubrir ese secreto, pero mantenerlo oculto, sin prisa.
Aprender a esperar, aumentar la paciencia, evadirse de los gritos para gritar tú en silecio sin que nadie sea capaz de escucharte. Mirar al cielo esperando encontrar una respuesta que nunca llega. Seguir andando, día a día,minuto a minuto. Contar los segundos que pasas mirando el caminar de la manecilla del reloj, rápido, incesante y desear pararlo, aprender a esperar, dejar de sentir. Seguir adelante, reí, llorar, correr, gritar, seguir las manecillas del reloj.


Si me sueltas entre tanto viento, ¿cómo voy a continuar?